Bonus Track: De las concentraciones geográfico-temporales
Published:
En la [tercera entrada] de mi trilogía, que busca comprender la serie de eventos que condujeron a Ecuador a sumirse en una espiral de violencia, demostré que el efecto causal aislado adquiere mayor credibilidad debido a la concentración geográfica y temporal de las muertes violentas de intención no determinada. Estas muertes, que incluyen estrangulamientos y envenenamientos en los que "la información disponible no permite distinguir entre accidente, lesión autoinfligida y agresión", según la [Clasificación Internacional de Enfermedades], se concentran específicamente en provincias situadas en las rutas clave del narcotráfico de cocaína. En ese análisis, mi razonamiento central fue el siguiente:
Imaginemos que las muertes violentas de intención no determinada son completamente accidentales. Si esto fuera cierto, entonces esperaríamos que su distribución geográfica y temporal a lo largo del Ecuador sea bastante uniforme, ya que no estamos hablando de un virus o una enfermedad que se propaga. Si encontramos que la distribución es más o menos uniforme, entonces no podríamos atribuir directamente los resultados a la clausura de la Base de Manta en 2009. Pero, ¿qué nos dice si, al analizar las variaciones de estas tasas, vemos patrones que concentran ciertas provincias juntas, asumiendo que estas tasas reflejan simplemente accidentes?
Tras realizar el mapeo geográfico-temporal respectivo, [ilustré] la existencia de fuertes concentraciones que resultan difíciles de explicar prima facie, lo que fortalece la credibilidad de que las variaciones de donde emerge el efecto causal aislado están vinculadas con las rutas de la cocaína. A pesar de todo el trabajo realizado, he recibido varias críticas de seguidores del expresidente Rafael Correa, generalmente de tipo ad hominem. Mi favorita, por parte de [una persona cercana a Ricardo Patiño Aroca], sostenía que "Tomasi era un anarquista crítico del capitalismo, ahora convertido en propagandista de las bondades del neoliberalismo y la Escuela de Chicago". En otras palabras, en lugar de considerar la evidencia estadística sobre un tema tan delicado, se recurre a ataques personales y a la búsqueda superficial de errores, a pesar de que he hecho públicas tanto mis bases de datos como los comandos en R para la replicación del análisis. Sin embargo, no me quejo demasiado, en la medida en que [ya casi nada me sorprende].
He tomado las críticas superficiales de la mejor manera que sé hacerlo: como oportunidades para mejorar aún más el análisis. En concreto, las reformulé como una pregunta: ¿Esta otrora inexplicable concentración geográfica-temporal ocurre también con muertes catalogadas oficialmente como accidentales? Para ilustrarlo, me enfoqué en la categoría "Accidentes de transporte terrestre" del Registro Estadístico de Defunciones Generales del INEC. A continuación, presento una colección del cotejo y contraste respectivo, en donde utilizo esta categoría de accidentes como un "Placebo" extra que robustece aún más los resultados de mi diseño cuasi-experimental, en la medida en que las concentraciones geográfico-temporales parecen ocurrir en tal magnitud únicamente en las muertes violentas de intención no determinada.
Años: 2009-2010
Años: 2012-2013
Años: 2016-2017
En la base de datos, disponible en este [link], utilizando el mismo comando en R detallado en mi [tercera entrada], es posible corroborar que la distribución de los accidentes de transporte terrestre es bastante uniforme durante todo el período de estudio.
Otro aspecto positivo derivado de este ejercicio de robustez fue el descubrimiento de patrones llamativos en la tasa de suicidios desde 2014, detalles disponibles en el [enlace anterior]. Desde ese año en adelante, la tasa de suicidios mostró un incremento constante, alcanzando niveles récord nunca vistos desde 1999 en los años inmediatamente posteriores.
¿Será este el siguiente paso del análisis de las [muertes violentas inusuales] ocurridas desde la salida de la Base de Manta en septiembre de 2009 hasta la ruptura política entre Rafael Correa y su sucesor y exaliado, Lenin Moreno? Habrá que agradecer a los autodenominados "correístas" por esta potencial nueva línea de investigación.